¿Por qué dormir sobre una funda de almohada de seda?

¿Qué tiene de especial la seda?
La superficie de la seda es un 80% más lisa que la de una funda de almohada de algodón normal, por lo que no se forman hendiduras ni arrugas en la cara mientras dormimos.
La seda es una fibra natural y extremadamente suave con la piel.

Por tanto, según los dermatólogos, puede tener un efecto positivo en la piel, sobre todo en la problemática y sensible, al impedir que se obstruyan los poros y prevenir la irritación y el enrojecimiento.
La piel se arruga menos, lo que reduce el riesgo de que aparezcan arrugas laterales cuando te gusta dormir boca abajo o de lado.

Los peluqueros, por su parte, afirman que, a diferencia del algodón tradicional, la seda no se arruga, por lo que es menos probable que el pelo se rompa y se enrede mientras duermes, y la recomiendan especialmente para las personas con el pelo seco, rizado o encrespado.
La seda no absorbe mucha humedad, lo que significa que tu pelo estará más hidratado, brillante y fácil de peinar por la mañana.
La almohada actúa como el mejor cepillo para el pelo mientras duermes.

Sin embargo, quienes duermen sobre seda afirman que el mayor beneficio es un sueño nocturno fresco, la seda protege la piel del sobrecalentamiento, y como sabemos, el sueño es uno de los mejores cosméticos.
La seda es un material excepcional por su naturalidad.
Las personas con el pelo rizado, en particular, apreciarán dormir sobre seda.
Se notarán menos roturas y los mechones mucho más lisos.
El pelo será más fácil de peinar.
Basta un mes para notar la diferencia.

¿Cómo afecta al cabello una funda de almohada de seda?

A veces el pelo es más desagradable al tacto después de despertarte, mientras que cuando te acuestas puedes apreciar su suavidad y delicadeza.
Una funda de almohada de seda ayuda a evitarlo.
El pelo que roza una almohada de seda, a diferencia de una de algodón, no se enreda y no está expuesto a sufrir daños.

Las escamas del pelo que rozan la funda de la almohada no se adhieren a la superficie de ésta y se deslizan por ella, por lo que las puntas no se abren, provocando puntas abiertas.
Además, dormir sobre una almohada de seda evita que el pelo se encrespe por la electricidad estática.
Mantiene tu pelo hidratado para que no se seque demasiado.

Utilizar una almohada de seda también ayuda a mantener tu pelo fresco.
El material se adapta a la temperatura, por lo que se calienta en invierno y se enfría en verano.
Así que no tienes que preocuparte de que tu pelo y tu piel se engrasen.
Además del pelo, una funda de almohada de seda funciona de forma similar en las pestañas.
Por eso es útil para solucionar el problema de su pérdida o engrosamiento.
No las engancha ni las arranca, y ayuda al pelo a cuidarse y a absorber los cosméticos o sueros que aceleran su crecimiento.

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La seda se obtiene de los insectos, más concretamente del capullo del gusano de seda de la morera o del roble.
Su carácter único reside en su resistencia, flexibilidad, suavidad, delicadeza y brillo, que debe a las fibras proteínicas a partir de las que se produce.
En el cuidado cotidiano de la piel, ayuda a inhibir la formación de arrugas, a curar el cabello dañado y a salvar la vida de los alérgicos.
Pero, ¿cómo funciona tan perfectamente en el campo de la belleza?

¿Cuáles son los beneficios de la seda?

Protege contra las arrugas, las arrugas no sólo se forman por el paso del tiempo o los rayos UV, también privamos a nuestra piel de elasticidad debido a la presión mecánica.
¿Te has despertado alguna vez después de una larga noche y te has encontrado una almohada apretada contra la cara?
¡No debería ser así!
Una funda de almohada de seda es suave, resbaladiza y elástica, lo que significa que nuestra piel es tratada con suavidad y no sufre antiestéticas «agujetas» por la mañana.

Cuando duermes, una funda de almohada de seda no crea una especie de picadura en la piel, lo que reduce la aparición de arrugas del sueño, como las patas de gallo.
Es más, hace que tu rostro se sienta descansado en vez de hinchado por la mañana.
Una de las razones es que la fricción se reduce hasta un 42% en comparación con el algodón.
Así que no irrita la piel, es suave y calmante, y al mismo tiempo no obstruye los poros, por lo que es ideal para pieles sensibles.
Cuando entra en contacto con la piel, una funda de almohada de seda es suave, delicada y no tan resbaladiza como podría pensarse.
No se pega a la piel como los tejidos sintéticos.

Ayuda a retener la humedad

La superficie porosa de una almohada de algodón absorbe la humedad de la piel, lo que significa que incluso las cremas hidratantes sirven de poco.
La seda ayuda a retener la humedad, por eso es un material ideal para el cuidado nocturno de la piel.
Aplícate tu crema, aceite o mascarilla en el rostro antes de acostarte sin preocupaciones y disfruta de los resultados por la mañana.

Una almohada de seda es segura para tu pelo

Y por eso, literalmente, todos los frikis del cabello están locos por ella.
Si crees que es una exageración, debes saber que pasamos 1/3 de nuestra vida en la cama y que nuestro pelo y nuestra piel entran en contacto con la funda de la almohada más que con ningún otro material.
Si cuidas tu pelo durante el día, ¿por qué destruir los efectos de ese cuidado por la noche?

El pelo sobre la seda no está sujeto a fricción ni aplastamiento, y no tienes que preocuparte por el encrespamiento, las puntas aplastadas o el consabido «nido» en la cabeza nada más levantarte de la cama.
¿Cómo proteger completamente el cabello para dormir?
Lo mejor es peinarte antes de acostarte, protegerlo con un aceite capilar y recogerlo en una trenza suelta si tienes el pelo liso o una coleta en medio si tu pelo es más rizado y atarlo con un paño de rizo de seda.

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Una almohada de seda es hipoalergénica

La seda es un material que no acumula ácaros, hongos ni alérgenos.
Por tanto, es el material perfecto para pieles propensas al acné, pieles problemáticas, pieles alérgicas, ¡todo tipo de pieles!

La seda tiene propiedades termorreguladoras

La seda enfría el cuerpo incluso en las noches calurosas.
La almohada nunca está caliente, sudorosa o pegajosa por los cosméticos.
Lo mismo ocurre con una bata de seda: ni siquiera un cuerpo cubierto de loción queda pegajoso.
Es más, el pelo bien fijado y peinado sobre una funda de almohada de seda tiene un aspecto impecable incluso después de dormir toda la noche.