¿Cómo elijo una plancha para el pelo?
Las planchas existen desde hace mucho tiempo.
Bastan unos instantes para transformar el encrespamiento y los rizos en elegantes ondas.
Pero hoy en día no todas las planchas funcionan igual: puedes elegir planchas con funciones muy diferentes.
Todo depende de las soluciones utilizadas.
Al elegir un aparato, es importante prestar atención a la forma y el revestimiento de las placas, ya que garantizarán que el calor se distribuya uniformemente por su superficie.
La ionización evitará la electricidad estática y dejará tu pelo perfectamente liso, y el control de la temperatura protegerá tu pelo de los daños, así que todo lo que tienes que hacer es elegir el ajuste correcto y adaptarlo a a tu tipo de cabello.
Para las mujeres que se desplazan, recomendamos modelos que puedan peinarse sobre el cabello húmedo o mojado, así como sobre el cabello seco, para ahorrar tiempo y flexibilidad.
Las mujeres damos mucha importancia al aspecto de nuestro pelo.
Llevamos muchos años dejándonos crecer el pelo, así que no es de extrañar que queramos cuidarlo lo mejor posible.
¿Qué debo buscar en una plancha?
Una plancha alisadora te permite alisar el pelo utilizando altas temperaturas.
En primer lugar, como su nombre indica, te alisa y alisa el pelo.
Todo lo que tienes que hacer es colocar un mechón de pelo entre las placas calefactoras y tirar del aparato a lo largo de él.
A la hora de comprar el dispositivo adecuado, tienes varias opciones entre las que elegir:
- ¿Recubrimiento cerámico o de titanio?
- ¿Con o sin ionización?
- ¿O tal vez vapor?
Lo más importante es que el modelo se adapte a tus necesidades y al estado de tu cabello.
¿Cómo te alisas el pelo?
- Las reglas básicas del cuidado del cabello
El alisado requiere mucho calor.
El contacto directo con las placas calientes de una plancha puede resecar el pelo.
Por eso es importante cuidar el cabello de forma equilibrada, para que esté bien nutrido y protegido.
Una vez hayas evaluado el estado actual y las necesidades de tu cabello -por ejemplo, si está encrespado y apelmazado o seco y áspero al tacto-, elige un acondicionador que contenga los principios activos adecuados.
Estos se dividen en emolientes, proteínas y humectantes.
Es mejor alisar sólo el pelo seco, ya que la humedad no se lleva bien con la electricidad.
Corres el riesgo de electrocutarte o de dañar la plancha.
Las mechas húmedas también tienen más probabilidades de dañarse.
La excepción es un aparato con función Húmedo y Seco.
Respetuoso con el cabello
El objetivo es proteger al máximo las hebras que se van a alisar.
Todos sabemos que las altas temperaturas no son buenas para nuestro pelo.
Por eso es importante que la plancha proteja tu pelo todo lo posible de los efectos indeseables del peinado con calor.
La regulación y los niveles de temperatura son importantes en este sentido.
Tu plancha debe tener una amplia gama de ajustes de calor para que puedas elegir la temperatura adecuada para el estado de tu pelo.
También es buena idea que tenga funciones de seguridad adicionales, como ionización y generación de vapor.
Cabello grueso, ingobernable y/o rizado
¿Tienes el pelo grueso y difícil de peinar o quieres rizos fuertes?
Una plancha con revestimiento de titanio es una de las mejores opciones.
También es una buena idea si te alisas el pelo todas las mañanas y quieres ahorrar tiempo, ya que el titanio conduce bien el calor y se calienta rápidamente.
Si quieres utilizar tu plancha para varias personas, elige una con revestimiento anodizado, que se limpia fácil y eficazmente.
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La queratina funcionará bien si sólo utilizas la plancha ocasionalmente.
Si la utilizas a diario, elige un modelo que emita queratina además de aceite.
Extracción de vapor
Esta es una de las opciones más interesantes.
En primer lugar, gracias a esta función, puedes utilizar el aparato con seguridad, incluso sobre mechones húmedos, sin secarlos antes ni exponerlos a calor extra.
Además, el vapor funciona bien para alisar los rizos naturales.
Un aparato de vapor no es recomendable para el pelo graso.
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Utiliza los productos adecuados
Utiliza sprays y lociones protectores del calor antes de alisarte el pelo para protegerlo de los efectos nocivos del calor.
Utiliza productos de peinado (laca, gel, etc.) sólo después del tratamiento.
De lo contrario, te complicarás las cosas y corres el riesgo de dañarte el pelo.
Utiliza la plancha sólo con el pelo sano
Cuando alises el pelo dañado, ni siquiera los cuidados muy intensivos funcionarán.
En primer lugar, adapta la temperatura a tu tipo de cabello.
Las hebras finas y débiles necesitan la temperatura más baja posible.
Tómate un descanso de peinarte
Intenta no utilizar la plancha todos los días si es posible.
Un pequeño descanso no te vendrá mal.
Además, elige un modelo que haya sido probado.
Es esencial utilizar un buen aparato y cuidar tu pelo.
Conducción uniforme del calor
Las placas de la plancha deben calentarse uniformemente para que puedas peinar cada mechón a la misma temperatura.
De lo contrario, pueden formarse puntos calientes en la superficie y quemar los mechones.
Deslizamiento suave
La superficie de las placas calefactoras debe crear la menor fricción posible durante el peinado.
Es importante que la plancha se deslice suavemente sobre el pelo para que puedas peinarlo cómodamente y sin pliegues antiestéticos.
Calentamiento rápido
La potencia del aparato es la principal responsable del tiempo que tardan en calentarse las placas.
Cuanto mayor sea la potencia, más rápido estará lista la plancha para su uso.
La plancha alisadora debe calentarse en pocos segundos (de 10 a 30).
Si tarda más, considera la posibilidad de buscar un aparato más potente.
Plancha fría para alisar
Situada junto a la placa enderezadora principal.
Suele ser de mármol y no se calienta.
Reduce la temperatura del pelo alisado y cierra sus cutículas.
Esto hace que el pelo sea más suave, brillante y menos propenso a dañarse.
Enfriamiento rápido
Al igual que se calienta, una plancha alisadora también necesita enfriarse rápidamente.
Esperar a que las planchas se enfríen puede ser realmente molesto en un momento en que necesitas guardar el aparato casi inmediatamente en una maleta.
Por supuesto, los fabricantes incluyen una funda protectora del calor con algunos modelos, pero no siempre pensamos en llevarla con nosotros cuando viajamos.
Tipos de revestimiento: ¿cuál elegir?
La base de una compra satisfactoria es conocer las características más importantes de los revestimientos que los fabricantes ofrecen en los aparatos de plancha.
Cada material utilizado tiene propiedades diferentes, por lo que debes leer sus especificaciones antes de invertir en un aparato concreto.
Revestimiento cerámico
Es el revestimiento más común en la mayoría de las planchas del mercado.
Distribuye el calor uniformemente por las placas, minimizando el riesgo de quemarte el pelo.
La ventaja de este revestimiento es que se calienta rápidamente.
Además, las placas cerámicas son resbaladizas y suaves, por lo que se deslizan fácilmente sobre el cabello y no lo tiran al peinarlo.
Los fabricantes también suelen ofrecer planchas de pelo con un revestimiento cerámico a base de queratina.
Las placas enriquecidas con queratina cuidan tu pelo durante el peinado.
La queratina se produce por el calor y penetra en los mechones de pelo que se van a alisar.
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Revestimiento de titanio
Se considera una de las más duraderas y resistentes a los arañazos.
Por eso, las planchas con este tipo de superficie no suelen ser baratas.
Son más duraderas que la cerámica, así que si compras una plancha con revestimiento de titanio, puedes estar segura de que te durará muchos años.
Las placas de titanio son perfectas para el pelo con rizos fuertes o textura gruesa. Las placas de titanio también son más lisas que las de cerámica, por lo que se deslizan suavemente sobre tu pelo y lo peinan con precisión.
Si una plancha con revestimiento de titanio es demasiado pesada para ti, una plancha con revestimiento de cerámica y titanio puede ser una solución de compromiso.
La combinación de estos dos materiales reforzará las placas de cerámica, haciéndolas aún más resistentes y menos propensas a desgastarse.
Recubrimiento de teflón
Las placas de teflón evitan que las brocas se peguen a su superficie durante el alisado.
Las planchas recubiertas de teflón son baratas, pero cada vez son menos comunes en el mercado.
Este tipo de superficie no se recomienda para el uso diario.
Los revestimientos de teflón no calientan uniformemente, lo que puede resecar o incluso quemar las hebras.
Además, el teflón no es resistente a los daños, por lo que la plancha se estropeará con bastante rapidez.
El teflón se mezcla a menudo con cerámica o turmalinas, por ejemplo, lo que hace que las placas sean más duraderas y no tengan puntos calientes.
Revestimiento de espejo
Su gran ventaja es que es más suave que la cerámica.
Están perfectamente pulidas, por lo que moldear tu pelo será fácil y agradable.
Después de usar una plancha con placas de espejo, tu pelo quedará radiante y con un brillo impecable.
Revestimiento de turmalina
Su función principal es la ionización. Turmalinas son minerales que producen iones negativos cuando se exponen al calor.
Éstos, a su vez, neutralizan los iones positivos que se forman en el pelo tras el contacto con el calor.
Gracias a la ionización, el pelo no se encrespa ni se queda estático.
Sella las cutículas capilares para que el peinado quede perfectamente liso.
Hay muchos modelos en el mercado con placas cerámicas de turmalina.
La durabilidad y suavidad de la cerámica, combinadas con las piedras preciosas, garantizan unos resultados espectaculares.
Revestimiento anodizado
Se trata de una capa protectora especial aplicada a la superficie de las planchas mediante la técnica de oxidación anódica.
Además, distribuye el calor uniformemente para no dañar tu pelo.
No recomendamos invertir en una plancha con placas de metal o aluminio. Son muy perjudiciales para tu cabello y no garantizan un peinado seguro.
Si los utilizas en tu pelo, corres el riesgo de dañarlo radicalmente.
Y ése no es el resultado que queremos.
Es un truco de marketing, destinado a aumentar su atractivo para un comprador potencial y diferenciarlos de la competencia.
Al fin y al cabo, cada uno de estos nombres suena bien, incluso profesional, y puede dar la impresión de que el suelo en cuestión es mejor que las superficies ordinarias.
En la mayoría de los casos, no te dicen nada.
Recuerda que lo más importante de un revestimiento es el material del que está hecho, no su nombre.
Esto es lo que debes buscar al elegir una plancha para el pelo.
Elige la anchura de las placas en función de la longitud del pelo
Si tienes el pelo fuerte, largo o rizado, debes optar por una máquina con placas más anchas y largas.
Esto hará que el peinado sea realmente rápido y fácil.
Las planchas con superficies de calentamiento de entre 30 mm y 40 mm de ancho son perfectas para este tipo de pelo.
Sin embargo, cuanto más anchas sean las placas, más difícil te resultará alisar el pelo en las raíces.
Si quieres alisar un peinado muy corto o incluso el pelo de un hombre, opta por aparatos con placas finas, de entre 15 mm y 24 mm de ancho.
El modelo que elijas debe ser fácil de manejar y delgado.
Así podrás peinar fácilmente tus mechones con una precisión magistral.
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Para el pelo fino, medio o ligeramente ondulado, recomendamos elegir placas largas y estrechas de entre 25 mm y 30 mm de ancho. Lo más habitual es que veas el tamaño de 25 mm en las tiendas.
Es la anchura óptima de la superficie para que trabajes con comodidad y eficacia.
Si te gusta el pelo rizado, opta por una plancha que funcione también como rizador. rizador.
Así no sólo ahorrarás dinero, sino también espacio en el cajón del baño.
Las planchas con placas redondeadas te ofrecen la posibilidad de crear rizos flexibles y encrespados.
Es fácil conseguir ese rizo perfecto.
Algunos rizadores vienen con pinzas intercambiables que te permiten crear rizos de distintos tamaños.
Busca esto cuando compres tu rizador.
Diseño y características
La forma lo es todo: una plancha debe tener un agarre firme y sentirse bien en la mano.
Así, no se te caerá mientras te peinas y tu trabajo será suave y cómodo.
Asegúrate también de que sea ligera.
El cable debe ser lo suficientemente largo, idealmente entre 2 y 3 metros.
A veces no estás en contacto directo con el espejo, por lo que un cable corto puede dificultar el peinado.
Un cable largo también es más práctico en una peluquería.
También debes comprobar que el cable sea giratorio y flexible, ya que así será más fácil maniobrar el aparato, sobre todo al hacer rizos.
Un candado de viaje, útil si quieres llevarte la plancha de pelo de viaje.
El candado facilita su almacenamiento y protege las placas de posibles daños.
No necesitarás enrollar el cable alrededor de la plancha.
No todas las planchas tienen este soporte, lo cual es una pena.
Más de una vez, cuando has terminado de trabajar, te gustaría colgar la plancha en una percha o en un gancho del baño.
Con un soporte así, también ahorrarás espacio en tu armario.
Bordes de la plancha redondeados, si quieres que tu plancha actúe como un rizador, los bordes de las superficies de calentamiento deben ser redondeados.
Esto te permitirá crear una tormenta de rizos con diferentes giros.
Placas móviles, su función es distribuir la presión ejercida sobre las hebras durante el peinado.
Se adaptan perfectamente al cabello y cambian de posición cuando la presión es demasiado fuerte.
Gracias a ellas, podrás peinar cualquier estilo con precisión.
La pantalla digital te permite controlar mejor la temperatura.
Además, la pantalla muestra las funciones adicionales activadas, como los programas seleccionados o el bloqueo de temperatura.
A las mujeres les suele gustar ver lo que ocurre con el aparato mientras está en marcha, así que la pantalla LED es imprescindible.
Control de temperatura: es una función básica que toda plancha segura debe tener. ¿Por qué debe tenerla? Porque la temperatura de calentamiento debe adaptarse al tipo y estado de tu pelo.
Porque no existe una temperatura universal adecuada para todas las mujeres.
Y si no es regulable, puede dañar mucho tu pelo.
Calentamiento de alta potencia: la potencia determina la rapidez con que se calienta la plancha.
Cuanto más potente sea, antes podrás empezar a peinarte.
Características principales
La ionización es un sistema que genera iones negativos para un alisado máximo.
Cierra las cutículas del cabello para evitar el encrespamiento y la electricidad estática.
También protege los mechones teñidos de la decoloración.
La generación de vapor hidrata el cabello y lo protege de la pérdida de agua.
No sólo reduce el tiempo de peinado, sino que también tiene un efecto nutritivo y revitalizante.
Esta función te ahorra tiempo al programar tu rutina diaria de planchado.
Si vuelves a encender la plancha, se calentará automáticamente a la última temperatura seleccionada.
Termostato, protege el aparato del sobrecalentamiento, evitando que el pelo se queme.
También mantiene una temperatura constante.
Alisado en húmedo: esta función te permite peinar mechones de pelo húmedos sin tener que secarlos antes.
En general, no se recomienda peinar el pelo mojado.
Por eso es buena idea elegir una plancha especialmente diseñada para este fin.
Ultrasonidos/vibración: hace vibrar las hebras para que tu pelo esté aún más suave.
La luz infrarroja penetra profundamente en el pelo y tiene un efecto positivo en su estado.
No sólo protege las hebras durante el peinado, sino que también las reconstruye y rejuvenece.
También protege el pelo teñido de la decoloración.
Bloquea los ajustes de calor, una función útil que evita que cambies accidentalmente el nivel de calor de las placas mientras alisas.
Calentamiento rápido hasta la temperatura máxima, esta función te permite calentar las placas de cocción hasta la temperatura máxima en un solo clic.
Sensor de humedad: el aparato equipado con este sensor mide el nivel de humedad de tu pelo y ajusta la temperatura según el nivel de humedad actual.
Esto protege tus mechones de la pérdida de agua.
Selección automática de temperatura, si no sabes qué nivel de calor es el adecuado para tu pelo, una plancha con esta función lo hará por ti.
Ajusta automáticamente la temperatura para no dañar la estructura de tu pelo.
Parada automática: las planchas con esta función se paran automáticamente después de un tiempo determinado.
Suele ser entre 30 y 60 minutos.
Si te olvidas de desenchufarla, no tendrás que preocuparte de que se sobrecaliente.
«Uno de mis mayores sueños es que mi negocio pueda cambiar el curso de la vida de una familia, un niño cada vez, retribuyendo a la comunidad«.